Todos los Argentinos deberíamos sentirnos orgullosos de este reconocimiento mundial que da por tierra con la prédica constante del monopolio de prensa y de la oposición parlamentaria, respecto a un supuesto aislamiento de la Argentina del mundo. Aislamiento que por el contrario comenzó a dejar de ser con el advenimiento del gobierno de Nestor Kirchner y hoy el de Cristina. Logró en poco tiempo un fuerte predicamento mundial y participa en los mas importantes foros institucionales del mundo.
Pero no para todos esto es así en nuestro país, donde fue demonizado por el monopolio de prensa que denigró la libertad de expresión y distorcionó la información de manera inusitada, promoviendo incluso hasta un golpe institucional. Estamos en la víspera de enmendar esta problemática con la vigencia de la Ley de Medios. Incluso más, hay que avanzar en fortalecer espacios en poder de la comunidad organizada. Pero ojo, debemos velar por no caer en poder de los que viven de la teta del Estado, sin hacer el esfuerzo para superarse. Necesitamos medios abiertos a la libre expresión de las ideas que sean eficientes y se asienten en las diferentes regiones para una auténtica participación popular.
El odio puede más en aquellos que consagraron su vida al servicio de los poderes económicos y a los intereses extra zona, comúnmente denominados derecha y la izquierda de esa derecha, que también puede ser calificada de derecha, funcional a la primera, caso Pino Solanas, Partido Obrero y otros. Son aquellos que se resisten a la construcción de una Nación Justa, Libre y Soberana. Su identidad ciudadana resulta así un simple acto de hipocresía. En realidad no se sienten Argentinos o limitan la Argentina a un país chico, de pocos, enclave de potencias extra zona, o reservorio para próximas ocupaciones. En el fondo descreen de la dignidad de la persona humana y reniegan de la emancipación nacional.
Lo anterior no nos hace a nosotros mejores, por los que nos manifestamos parte del Movimiento Nacional y Popular. Debemos testimoniar día por día que somos mejores y que estamos al servicio de los demás, en el lugar público o privado que nos toque actuar. Principalmente cuando lo hacemos en la órbita del Estado o de las empresas descentralizadas, cuyo funcionamiento debe ser de alta calidad. Y no me refiero sólo a los cargos políticos, sino también hasta en la mas humilde de las tareas. Esto está muy lejos de ser todavía una realidad. Ni el más importante, ni el más humilde en función del Estado está por encima del más desamparado miembro de nuestra sociedad, sino a su servicio. Es algo que deben comprender los que ocupan funciones dirigenciales, muchas veces reclutadados sin el consiguiente mérito militante, simplemente por amiguismo.
La prueba más simple de este déficit, lo constituye la cultura que estamos viviendo, donde para obtener respuestas de la maquinaria estatal, la sociedad se ve obligada muchas veces a aplicar recursos extremos, afectando el funcionamiento de toda la sociedad. También las organizaciones gremiales estatales, cuándo por cualquier motivo sin ponderar las consecuencias paralizan el normal funcionamiento de los organismos públicos. Nada de esto es gratuito, tiene su costo en el presupuesto del Estado y en el funcionamiento de la sociedad que afectan recursos que deberían ser aplicados al desarrollo y a la inclusión social. Los temas deben ser resueltos sin patear las cosas para adelante. Es otra cosa que deberían aprender los funcionarios del Estado y ser diligentes para incluso anticiparse a los problemas con soluciones puntuales. En la órbita municipal, provincial y nacional.
Es la conciencia moral que debe impregnar la política y la sociedad y ésta informar la economía. Es el gran paso que estamos dando, con muchísimas dificultades, abriendo el camino hacia un nuevo estadio de civilización. El legado de quien recogió la democracia y la política, del fango en que la habían depositado los gobiernos que lo precedieron luego de la dictadura genocida. Toda construcción lleva en su seno los buenos y los malos, los que sirven y los que se sirven. (Esto es que la paja crece junto al trigo) Debemos aprender a distinguirlos de la manera más sencilla: Su modo de vida, para paulatinamente ir aislando a los que se sirven. La corrupción es una cultura establecida como normal por el neo liberalismo, que se verifica en el ámbito público y en el privado e infecta a todas las capas de la sociedad. Es necesario que cada cual observe su propia conducta porque si todos adquirimos una cultura moral, en poco tiempo quedarán en evidencia los comportamientos corruptos en quienes tienen poder de decisión y allí podrá obrar la sanción social que es la única que garantiza plenamente el cese de la impunidad.
Tras la muerte de Nestor Kirchner, todos podemos coincidir que se establece en la conciencia colectiva de los argentinos, un nuevo icono. Nestor Kirchner. Nace el Kirchnerismo. Adviertase: Recién nace el Kirchnerismo con su muerte, y con ella, “florecen mil flores”. Dejemos que ellas florezcan, es el legado de Nestor Kirchner, su premonición. Quienes se sienten dueños, deben advertir que no lo son, que las flores nacen de la semilla sembrada en tierra fértil por quién obró de sembrador. Son los jóvenes que sin encuadramientos entre quienes pelean posesionamientos, se manifestaron en sus exequias, son los que desde siempre antepusieron el interés de la comunidad a su propio interés.
Deja Nestor Kirchner una sola referencia: Cristina con la que no eran dos, sino uno, unidos en carne y espíritu y que todo indica que continuarán siéndolo. Todo un símbolo de los valores más profundos de nuestra cultura. Todo un mensaje para una Argentina que debe lograr ser una, para una América del Sur y para una América Latina que debe lograr ser una. Y para la humanidad toda que superando todas las mezquindades y todos los egoísmos debe conformar una sociedad planetaria sin discriminaciones.
El Kirchnerismo se hace así la más genuina interpretación del Peronismo y de hecho la consumación del mismo en la praxis y en el pensamiento.. El uno y el otro se constituyen en una unidad indisoluble como respuesta a realidades y tiempos diferentes. Ahora sí es posible pensar en la presencia de un tercer movimiento histórico que puede plasmarse en la realidad para bien de todos. No porque sea el proyecto de alguien sino porque es la nueva realidad efectiva.
. El Kirchnerismo en sí mismo incluye los hechos del peronismo, no nacemos de un repollo, el peronismo fue la realidad efectiva que por las circunstancias históricas conocidas, no pudo consumarse en plenitud. Lease: la palabra escrita en la Constitución de 1949 y demás textos de Juan Domingo Perón, que nos muestran los hechos del Proyecto Nacional y Popular en el siglo XX; El testimonio de Evita que nos señala en lo que hay que creer: La felicidad del pueblo para que en ella se fundamente la grandeza de la Patria.
El bagaje moral que contiene la doctrina peronista nos indica el espíritu que debe impregnar la obra. Es decir, lo que hay que hacer:
- vigencia plena e integral de los derechos humanos a la vida y a la vida digna.
- El pragmatismo de las decisiones sin violentar la analogía con las fuentes de inspiración, hacia donde deben tender todos nuestros actos: hacia la liberación de la persona humana de toda opresión, para que en libertad puedan construir su vida, la de su familia y la de la comunidad con un sentido de trascendencia;
- la unidad sudamericana como antesala a la unidad latinoamericana en pluralidad para hacerla posible.
- La superación del macrocefalismo y la apertura de todo el territorio nacional hacia los pueblos hermanos, dejando la impronta de un país del fin del mundo y embudo hacia el Atlántico, para pasar a ser un país comunicador bioceánico.
- Las grandes líneas de una geo política que nos devuelve a la región y termina con el aislamiento de nuestros pueblos..
- La industrialización de los insumos para el desarrollo hasta que éstos en tiempos no muy lejanos puedan ser traídos desde el universo que nos circunda,
- la investigación científica y técnica y el patentamiento de la innovación que nos soluciona problemas actuales y prepara nuestra sociedad para el tiempo por venir, frente a la imposibilidad de seguir matando nuestro planeta o hipotecándonos pagando patentes extranjeras..
- La innovación tecnológica al alcance de todos en todo el territorio nacional
- El asentamiento del poder económico en la comunidad organizada y en la generalidad de las famililas, como freno a los dislates del capitalismo usurario sean estos empresariales o burocráticos.
- La defensa nacional mediante la ocupación poblacional de todo nuestro territorio y la defensa común de toda la América del Sur frente a cualquier agresión extranjera.
La dimensión histórica que el Kirchnerismo alcance depende entonces de lo que de aquí en mas todos hagamos, especialmente las jóvenes generaciones cultivadas en sus mejores potencialidades, No existe Kirchnerismo sin Kirchner y su continuidad efectiva es Cristina, como conductora de los pasos necesarios hasta que biológicamente se de el recambio generacional en una juventud formada en la realidad de una Nueva Argentina.
La unión sudamericana
Como la practicara Nestor Kirchner con la anuencia de todos los presidentes de Sudamérica. La Unión Sudamericana en gestación, no es una cuestión de corte ideológista. Es unir las fuerzas de todos nuestros países en función de un objetivo común, la inclusión social de todos los pueblos en sus respectivas sociedades y en el marco de la pluralidad, en un esfuerzo común de desarrollo, exaltando la búsqueda de conveniencias comunes para hacer frente a las geo políticas extrazona, sin menguar la soberanía de cada uno de los estados en sus decisiones y en búsqueda de los consensos necesarios para el crecimiento y la integración plena, respetuosos de la democracia en cada una de las sociedades, hasta que la realidad nos imponga la necesidad de ser uno.
A partir de Nestor Kirchner la UNASUR no se teje en función del simple rechazo a los intereses imperialistas o colonialistas de las economías centrales, sino en función del desarrollo independiente de la Patria Grande en un proceso gradual conforme las decisiones de cada Nación Soberana, en un esfuerzo común para cambiar la relación de fuerzas. A partir de allí se establece el diálogo frente a situaciones que conspiraban contra la unidad. Se aprendió a medir con la misma vara las decisiones de la concertación chilena, por ejemplo, y las decisiones del Perú y Colombia, por caso, que desde distintas versiones ideológicas, aplican políticas económicas similares .(Una versión más prolija del neoliberalismo) y soluciones diferenciadas a las que nosotros venimos aplicando
Como lo explicara la presidenta Cristina, la caída del muro de Berlín y con ella la desaparición de la Unión Soviética, se activó fundamentalmente por el deseo de un lado de consumir lo mismo que del otro lado. Es la lógica de las sociedades. La necesidad de vivir un mismo estadio de civilización con todo lo que ello implica, de libertad, de solidaridad, de derecho. La igualdad como paradigma de la humanidad. El mensaje revolucionario único que lleva 2010 años de evolución. El desprendimiento que no es una cultura de la miseria, sino el compartir con todos los bienes que nos han sido dados y que con esfuerzo multiplicamos.
La unión nacional
Como lo dice la propia referencia, el término de unidad nacional, no trata de una cuestión ideológica transferida desde las usinas europeas y propias de su realidad. La unidad se da en función de la defensa del interés nacional y no en el marco de un conflicto teórico y ajeno a nuestra realidad de izquierdas o derechas. Se combate con la idea y con los hechos, contra el colonialismo y los imperialismos. Los factores internos que desde los orígenes de nuestra nacionalidad responden a intereses extra zona.y actúan como testaferros. La necesaria oposición, que debe democratizarse para ser inteligible, sorteando la hegemonía dictatorial del poder económico concentrado, es decir oposición pero en términos nacionales, constituirá con el tiempo el salto cualitativo en materia institucional, hoy bochornosamente menguado por la actitud de su máxima expresión. Elisa Carrió fomentadora de la mano de yeso para una oposición sin duda irracional y sometida a los poderes económicos concentrados y por ende funcional a los sectores antinacionales.
La lucha contra el neo liberalismo y la reinstitución de la Justicia Social
Es la lucha por la igualdad social y contra el amesetamieno del individualismo y del egoísmo, infección que venimos sufriendo desde 1955 y que se estableció hasta hoy desde 1976 culminando con lo acontecido en la década del 90
. Ello nos habla de la necesidad del fortalecimiento de la familia como cimiento de la comunidad que es permanentemente agredida desde los medios de comunicación monopólicos, además de los tradicionales de corte ideológico producto de los excesos contra el libre albeldrío, como una manera de quebrar la cultura de la solidaridad que es el principio inalienable de la concepción peronista. Esta es la consecuencia mas nefasta del período iniciado con la dictadura genocida que no pudo superar el advenimiento de la democracia, hasta que Nestor Kirchner logró abrir una picada.
No se trata sólo de recuperar el individuo excluido, sino de recuperar la familia como primer fundamento de la organización social. Todo niño tiene derecho a ser protegido por sus padres biológicos o sustitutos y todo adulto mayor tiene derecho a ser contenido por el núcleo familiar que él a su vez contuvo. Cuando esto falta el rol debe ser suplido por el Estado. Sin familia, el individuo se transforma en un objeto manipulable por la política y descartable de la economía. Ningún poder económico concentrado es garantía de la salud de la comunidad. No luchamos por una sociedad mas justa, sino por una sociedad justa, donde ninguna generación es sacrificada en función de cantos de sirena. Una cultura plena de fortaleza, es aquella que atiende la problemática del presente con sentido de permanencia en el tiempo de la comunidad que le dio origen. Una cultura que no puede prescindir de la memoria y la memoria se traslada de generación en generación. Marginar a los adultos mayores, como sucede en la sociedad actual, es garantizar la existencia de una sociedad sin memoria. La vida no acaba con la muerte, es una creencia, digamos que puede que sí, pero una creencia que nos garantiza la existencia de una humanidad solidaria donde la persona humana desde su concepción no es descartable porque trasciende.y continúa siendo parte de nuestra propia vida. Es una creencia que da certeza y sentido a la vida. La pluralidad entonces se da en el marco de un estado laico en una sociedad mayoritariamente creyente que da marco a la cultura de nuestro pueblo que no tiene porqué ser violentada por las minorías respetuosamente consideradas.
Carlos Eduardo Oliva Velázquez. Córdoba, 20 de Noviembre de 2010
